SOMNIS La fragilidad del recuerdo


Sueño con disfrutar al máximo lo que tengo

Sueño con recordar mis dos amores que se fueron

Sueño con soñar despierto


La fragilidad del recuerdo, una realidad que metamorfosea en un sueño vivo, un camino sin final que nace de la tierra tratando de alcanzar inocentemente el cielo, una realidad melancólica difuminada por la inescrutable fuerza del tiempo, un castigo inevitable que condena al ser humano a deambular entre sus recuerdos en busca de un intento de salvación interior.


Soñar recuerdos, recordar sueños, vagar por el extrarradio de la realidad de hoy, en busca de la dicha del ayer.


No existe más esperanza que la nostalgia, en el intento por aferrase a la sencillez de lo cercano, a a aquello que revitaliza los recuerdos más preciados y nos devuelve al hogar del que partimos y al que soñamos volver, inalcanzable como la tierra que acaricia el cielo, suplicando a nuestro propio ser por reencuentros imposibles, por el abrazo del padre y por el beso de la madre, eternamente efímeros.

 

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